Cuando un niño toma una decisión, puede cambiar el destino de un proyecto escolar, influir en las relaciones de amistades e incluso cambiar una tarde de diversión. Los niños que son capaces de identificar y aprender de sus errores, suelen sentirse seguros al momento de elegir entre varias opciones.
“Todos tenemos la capacidad de elegir entre varias opciones. Los principales responsables de desarrollar las competencias espirituales y emocionales en los niños son sus padres. Mamá y papá promueven la confianza en ellos” afirma la psicóloga Yajaira Nucette.
En la mayoría de los casos, cuando los pequeños toman una decisión, sin importar lo insignificante que esta sea, piensan en lo que hubiese pasado en caso de haber elegido la otra opción. En ese momento es cuando debemos reforzar su autoconfianza.
La doctora Yajaira Nucette explica que para ayudar a los hijos en la toma de decisiones los padres deben:
- Incentivar a los niños a tomar pequeñas decisiones que correspondan a su edad.
- Permitir que los chiquitos expresen sus pensamientos, gustos y preferencias.
- Ayudarles a escoger sin decidir por ellos: ¿Qué ropa quieres usar hoy?, ¿Qué juguetes quieres llevar en tu bolso?, ¿Qué quieres merendar?, ¿Helado o galletas?
- No sobre proteger a los niños.
- Dejar que ellos puedan defenderse y compartir con su entorno.
- Tener mucha paciencia y respeto.
- Mostrarle alternativas.
- Brindarle la oportunidad de participar en las decisiones, siempre y cuando sean acordes a su edad.
Es importante saber que se debe tener un cuidado especial con la tecnología. En algunas ocasiones esta inmensa herramienta no estimula la toma de decisiones, debido a que presenta varias alternativas en un solo dispositivo.
Siempre se deben realizar juegos en donde se incluya la toma de decisiones. Por ejemplo, juegos al aire libre o juegos de mesa. Como padres debemos tener en cuenta que constantemente somos entrenadores educativos y debemos fomentar la participación de nuestros hijos.