Muchas veces no nos sentimos a gusto en el trabajo. Puede ser por motivos salariales, emocionales o simplemente porque no nos gusta lo que hacemos y se desarrolla en nosotros un sentimiento de frustración.
La frustración puede tener consecuencias tanto en nuestro rendimiento como en nuestras relaciones laborales e interpersonales por lo que es importante saber manejar la frustración en el lugar de trabajo y puedes hacerlo siguiendo estos consejos.
Reconócela
El primer paso siempre debe ser reconocer que algo está sucediendo. Reconocer la frustración y de dónde proviene puede ayudarnos a solucionarla o por lo menos a convivir con ella.
Contrólala
Por lo general cuando estamos frustrados tenemos reacciones impulsivas que pueden ser perjudiciales para nosotros y nuestro entorno. Por eso es importante contolar la frustración.
Acepta y reconoce tus habilidades
Así como es bueno reconocer en lo que somos buenos debemos tener claro en qué puntos debemos mejorar, de lo contrario nos frustramos.
Háblalo
Si la frustración viene generada por un problema con algún compañero de trabajo o jefe, lo mejor es hablarlo, desahogarse y continuar. De lo contrario la frustración aumentará y no llevará a ningún lugar.
Supéralo
No te quedes encasillado dentro de la situación de frustración. Después de hablarlo, aprende de ello y continúa.
Sigue estos consejos y verás como tu situación laboral cambiará y tus relaciones mejorarán considerablemente, siempre y cuando sepas controlar la frustración.
Recuerda, "No existe gratificación alguna para los sentimientos frustrados" Phillip Pullman.
Cómo manejar la frustración en el trabajo https://t.co/HJrtyEZ4PS