Los niños, cuando tienen corta edad, están propensos a muchas más enfermedades que cuando crecen y desarrollan más defensas. Asimismo, el estar en presencia de personas fumando, puede hacerles mucho daño; y ni se diga, si el contacto con el tabaco ocurre desde la gestación.
¿Sabías que los niños que desde el útero o durante la primera infancia tienen contacto frecuente con el tabaco tienen el doble de probabilidades de desarrollar pérdida auditiva? Conoce aquí los resultados de un interesante estudio japonés.
Datos de interés sobre el tabaco y la pérdida auditiva
Una investigación japonesa ha encontrado que los niños que han sido expuestos al tabaco, tanto durante el embarazo y durante la primera infancia; tienen el doble de probabilidades de padecer de pérdida auditiva. Esto, en comparación con los niños que no han sido expuestos de ninguna manera.
Los resultados se derivaron del análisis de los datos correspondientes a 50.734 niños nacidos entre los años 2004 y 2010; en Kobe, Japón. De esta cifra, 4% estuvo expuesto al tabaquismo durante su vida prenatal o la infancia, y un 1% en ambos periodos.
Cuando cumplieron tres años de edad, a estos niños se les evaluó su capacidad auditiva encontrándose que el 4,6 por ciento de ellos, padecía pérdida auditiva. Asimismo, establecieron que el 68% de los niños expuestos al tabaco durante la gestación, padecían pérdida auditiva. Además, entre los expuestos al tabaco, como fumadores pasivos, durante la primera infancia, el 30% también padecía pérdida auditiva.
Tales resultados fueron explicados por el Dr. Matteo Pezzoli, especialista en audición en el Hospital San Lazzaro, en Alba, Italia; de la siguiente manera:
"Cuando las mujeres embarazadas fuman pueden perjudicar el desarrollo del cerebro del feto y conducir a una disfunción cognitiva auditiva". "El humo del tabaco también puede dañar los receptores sensoriales en el oído que retransmiten mensajes al cerebro en función de la vibración del sonido."
A nivel mundial, más o menos 68 millones de personas padecen de esta reducción de la capacidad auditiva, la cual, generalmente, fue provocada en la infancia.