Un oyente anónimo escribió y nos cuenta que desde hace meses, durante las relaciones sexuales con su novia, comenzó a sentir orgasmos sin llegar a tener eyaculación, algo que no le pasaba antes. Su novia cree que es falta de satisfacción pero él cree que se puede deber a una diabetes recién diagnosticada.
Rubén Hernández, sexólogo, estuvo invitado al programa para ayudar a nuestro oyente. El comenzó diciendo que esta es una de las disfunciones sexuales más complicadas de tratar porque generalmente obedecen a problemas psicológicos profundos en los cuales la persona no eyacula y pasa mucho tiempo en la actividad sexual produciéndose un cansancio y una situación de frustración en la pareja. Requiere de un análisis profundo de la propia persona y su pareja.
Los hindúes, los budistas o los que hacen yoga, pueden llegar a tener orgasmos sin eyaculación pero solo lo logran aquellas personas entrenadas en dominar la mente, llegando inclusive a modificar su actividad eléctrica cerebral y hasta su ritmo cardiaco. Expresó Hernández que no se le puede atribuir el problema a una diabetes. Esta es una enfermedad silente que produce un daño lento y progresivo y que tiene otras alteraciones como la disfunción eréctil pues afecta los vasos sanguíneos.
Los problemas de eyaculación, como la eyaculación precoz o la tardía, están relacionadas con problemas psicológicos, por lo general, temores o miedos que no saben ser manejados abiertamente en pareja. Se debe entender que es un problema de los dos y no solo del hombre que es el que lo padece, pues en la relación se trata de una pareja.
Fingir, o engañar a la pareja, aparentando un orgasmo tanto en el caso del hombre como de la mujer, lo que logra es empeorar la relación, pues no se manifiesta ni se trata. Cada persona tiene su forma de expresar su respuesta orgásmica; si la persona no la tiene, o no sabe si la tiene, es preferible que acuda a un especialista y pregunte antes de fingir.
Un oyente preguntó cuál es el tiempo promedio para que un hombre eyacule. El doctor explicó que según consenso, una eyaculación normal debe estar entre los 10 y los 15 minutos, sin embargo es muy importante tomar en cuenta el período pre-coito y post-coito, que son dos momentos que no tienen duración y que mientras más largos sean, mejor, pues son momentos de comunicación con la pareja en que se intercambia los deseos de ambos para lograr una satisfacción plena, lo cual fortalece la pareja.
Dr Rubén Hernández Pag. Web: www.rubenhernandez.com E mail: rubenhernandez@cantv.net
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