Muchas madres no están en la onda de leer historias antes de dormir a sus hijos o de prepararles el desayuno todos los días a su esposo e hijos antes de que se vayan de casa. ¿Y por qué? Pues a pesar de que las madres pueden verse siempre constantes, ellas está en un cambio continuo para mantenerse al día con los tiempos.
Para tener una idea de lo que es ser una madre del siglo XXI, aquí tienes 10 estudios recientes o encuestas que te darán un poco más de insight en este estilo de vida.
- Tengo una historia para ti:
De acuerdo a un estudio publicado en el diario Sex Roles, las madres son mejores que los padres contando historias y recordando con sus hijos, esto los ayuda a desarrollar sus habilidades emocionales. Los investigadores notaron que las madres incluyen más términos emocionales a sus historias y tienden a explicárselos a sus hijos.
- Tú preguntas, ella responde:
Una encuesta realizada a mil mamás en el Reino Unido reveló que la madre típica responde hasta 300 preguntas al día a sus hijos. Las niñas de 4 años tienden a ser las más conversadoras, realizando una nueva pregunta cada dos minutos.
- El toque mágico:
El tacto de la piel de una madre a la piel de sus hijos puede hacer una gran diferencia ayudando a los bebés prematuros y a los bebes en riesgo de lidiar con dolor y el estrés de las inyecciones. El tacto del padre o de una mujer que no esté relacionada con el bebé también ayuda a reducir el estrés y el dolor, pero nada es tan efectivo como el efecto del contacto físico de una madre.
- ¡Hasta la saliva de tu mamá es especial!:
Un artículo reciente en el diario Pediatrics recomendó que las madres limpien el chupón de sus hijos colocándolo en sus propias bocas. Así es, resulta que los infantes que reciben el chupón con la saliva de su mamá desarrollan menos alergias que los demás niños que tenían su chupón limpio con agua hervida y otros métodos. Estos infantes también tenían menos posibilidades de sufrir de eczema, menos signos de asma y menor cantidad de células blancas que se elevan al detectar alergias y otros desordenes. Esto incrementa la evidencia de que cierta exposición a los gérmenes a temprana edad es buena para los niños. Y no digas “¡Asco! Yo no haré eso.” Ya les limpias el panal, el probar su chupón no puede ser peor que eso.
- “Mamá se va a trabajar mi amor”:
Hoy en día, el 40% de las madres en E.E.U.U prefieren trabajar a tiempo completo de acuerdo a una investigación realizada por el Pew Research Center. La cantidad es casi el doble a la que se veía en 2007, cuando el 21% prefería esto. Es posible que esto sea a causa de los difíciles tiempos económicos, pero aun así, el 60% de las madres estadounidenses prefieren trabajar medio tiempo.
- No hagas lo que mamá hace:
Al igual que las madres pueden influenciar más a sus hijos para bien que los padres, aparentemente también pueden causar más daños. Un estudio de 34 años por Brithis Think Tank Demos revelo que el hábito de beber alcohol de las madres pueden tener un gran impacto en cómo sus hijos consumen licor. A los 16 años, el comportamiento de los jóvenes en cuanto al consumo de licor se ve muy influenciado por sus compañeros, pero esto cambia cuando los jóvenes maduran. Los científicos descubrieron conexiones claras entre el consumo de licor y las memorias infantiles de cómo solían beber sus madres.
- Padres estrictos, hijos poco eficientes:
A diferencia de la creencia popular, el método de crianza de un padre estricto y lejano ilustrado en el polémico libro Battle Hymn of the Tiger Mother 2011 es para nada efectivo y en ciertos casos hasta dañino para la eficiencia de sus hijos. Una profesora de la universidad de Texas llamada Su Yeong Kim decidió estudiar a más de 200 familias asiáticas-americanas por una década y sus estudios revelaron que los hijos padres excesivamente estrictos, lejanos y rigurosos suelen tener menores logros académicos y mas problemas psicológicos que los hijos de padres “relajados”.
- Incluso dentro del vientre, mamá te enseñaba a hablar:
De acuerdo a un estudio realizado a recién nacidos en Washington y Estocolmo, los bebés empiezan a aprender el lenguaje de sus madres antes de salir del vientre. Los estudios revelaron que los infantes empezaron a fijarse en los sonidos de las vocales de sus madres antes de nacer. Comprobaron esto estudiando a 40 infantes, con una edad aproximada de 30 horas, y notaron que los bebés, a lo cuales les mostraban grabaciones de lenguajes extranjeros de sus madres, constantemente se aferraban a su chupón cuando escuchaban un idioma diferente al que escuchaban dentro del útero.
- Los niños reducen el tiempo de vida de las madres:
Juzgando una investigación hecha en Finlandia entre el siglo XVII y XX, las madres que daban a luz a varones solían vivir 9 meses menos, en comparación a dar luz a mujeres. Los científicos analizaron el promedio de supervivencia de las madres 11.166 madres y 6.360 padres luego de dar a luz en la Finlandia pre-industrial. El estudio revelo que las madres que habían dado a luz a seis varones vivían cerca de 32,4 años después de su último hijo, mientras que las madres que daban a luz a niñas solían vivir un promedio de 33,1 años después de dar a luz a su ultima hija. El tiempo esperado de vida era el mismo indiferentemente de su situación económica y social, los investigadores asumen que esto es debido a que tener varones es más demandante para el cuero que tener mujeres, también está el hecho de que las niñas solían prolongar el tiempo de vida de las madres ayudando en los quehaceres del hogar.
- Los cavernícolas tenían una palabra especial para “mamá”:
Esto puede parecer insólito para algunos y no muy sorprendente para otros, pero un estudio publicado por el diario Proceedings of the National Academy of Sciences, sugiere que los cavernícolas no sólo gruñían, si no que tenían un pequeño y decente vocabulario. Algunas de las “palabras” que utilizaban, se trasladan rudamente a “tú”, “nosotros”, “leña”, “fuego”, “saliva” y como es de esperarse… “Mamá”.
Esa persona que soporto los llantos, las tonterías que hiciste, esa vez que te pareció fenomenal ponerte el plato en la cabeza para comerlo mejor, quien te limpió y limpió y volvió a limpiar ese pañal y quien, a pesar de todo, sigue queriéndote incondicionalmente, tu mamá. Todos tenemos la mejor mamá del mundo!
(Información extraída de: http://www.trove.com/channel/78624/content/0FtFL?via=email)