La piel de los hombres es diferente a la de las mujeres por varias razones:
- Ellos tienen la piel 24% más gruesa.
- Tienen mayor cantidad de elastina y colágeno.
- Producen mayor cantidad de grasa y eso los hace más propensos a sufrir de acné, brillo e imperfecciones.
- Su secreción sudoral es más ácida, por eso sufren más por los malos olores.
- La afeitada facial es muy irritante.
- Tienden a consumir más alcohol, cigarrillo y a trabajar y estresarse más. Todo esto se ve reflejado en la piel que puede presentar una apariencia opaca y cansada.
Para protegerlos a ellos, se pueden seguir unos pasos básicos:
1. Una vez al mes, un tratamiento facial es buena idea. Empezar con un exfoliante para retirar células muertas e impurezas, y finalizar con una crema nutritiva que repare la piel. El exfoliante se debe usar sólo en las zonas más grasosas, como la zona T.
2. Aunque se ha repetido hasta el cansancio, un bloqueador solar es el producto de belleza más importante de todos. El sol es responsable de envejecimiento prematuro, manchas y arrugas.
3. Después de los 30 años se pueden empezar a usar productos antiedad para combatir las arrugas, además de cremas para el contorno de los ojos.
4. Es importante escoger un desodorante acorde a las necesidades. Los hombres tienen más glándulas sudoríparas y, por ende, deben elegir un producto diseñado para ellos.
5. Es recomendable afeitarse después de ducharse para que los poros estén abiertos. El mercado ofrece productos especiales que preparan la piel.
6. Los aftershave son productos indispensables para todos los hombres, incluso los menos vanidosos. Estos hidratan y humectan la piel que ha sido sometida al estrés de la afeitada.
7. Usar un jabón facial para lavar el rostro por las mañanas, y si es lo suficientemente disciplinado, también por las noches.