Infografía: Las consecuencias físicas del enojo

Conocer las causas y consecuencias del enojo, nos ayuda a controlarlo y a solucionar nuestros problemas. Podemos enojarnos cuando nos sentimos atacados, lastimados física o emocionalmente, ignorados, rechazados, excluídos, engañados, acusados injustamente o frustrados. Sin embargo, esta sensación también implica una serie de consecuencias a nivel físico, pues nuestro organismo produce una mayor cantidad de sustancias químicas, entre ellas la adrenalina, la cual altera el funcionamiento normal del cuerpo.

Estudios recientes demuestran que la presión sanguínea se eleva durante el ataque de enojo, y las alteraciones orgánicas siguen reproduciéndose, incluso, una semana después, cuando recordamos el suceso original.

El problema es que, como no sabemos qué hacer con lo que sentimos, muchas veces guardamos o disfrazamos el enojo, un error que el cuerpo refleja tarde o temprano. A continuación, les ofrecemos una pequeña guía de las consecuencias que el enojo puede causar en su salud, y ciertos hábitos que lo ayudarán a sobrellevarlo de una manera más saludable.

Fuente:

Notimex, Centro Universitario de Ciencias de la Salud de la Universidad de Guadalajara.