A medida que los hijos crecen es difícil de verdad cuidar su nutrición. Al tomar por si mismos decisiones que muchas veces no son las correctas para su salud, culpamos a nuestros hijos por lo que comen, pero cuantas veces supervisamos esa conducta?
Debemos estar encima para que se alimenten no sólo de forma nutritiva, sino que además cumplan con todas las comidas diarias. A continuación 4 de las perores decisiones alimentarias de los adolescentes que debemos controlar:
Saltar el desayuno:
El desayuno es la comida principal y la mayoría de los adolescentes la saltean. El desayuno es importante por varias razones, uno es que es la comida que lo proveerá de energías para el día, y además es una forma de regular su peso, controlando que no lleguen al almuerzo con el estómago vacío, y coman de más.
Los “otros” alimentos:
El otro hábito adolescente poco saludable es incluir “otros” alimentos a su dieta alimenticia. Los alimentos con alto contenido en grasa, la comida chatarra, los dulces y las bebidas han aumentado en el consumo adolescente. Esta comida chatarra acarrea consigo que el adolescente suba de peso, tenga problemas de piel, y no rindan físicamente ni a nivel escolar. Exija el consumo de frutas y verduras.
Consuma fuera de casa:
Es otro mal hábito de los adolescentes quienes van a restaurantes de comida rápida mucho más a menudo. Esto tiende a ser por la escuela, deportes y los horarios de trabajo que se superponen a los horarios regulares de las comidas. Enviarles una buena lonchera con comida sana y nutritiva es una mejor alternativa.
Las gaseosas:
Por último, pero no menos importante, en esta lista de malos hábitos alimenticios es el consumo de refrescos. Usted puede ayudar a su hijo a elegir una bebida saludable de jugos de fruta y agua disponible y no comprar gaseosas. El agua carbonatada con sabores frutales puede ser una buena opción en lugar de un refresco.
Debemos estar atentas a estos factores y seguir guiándolos dentro de una alimentación saludable para que su salud sea optima para rendir en esta difícil etapa de la vida.
(Fuente: nutrición.pro)