Un código QR es, por sus siglas en inglés, un "Quick Response Code", es decir, un código de respuesta rápida. Tanto los consumidores como las marcas tenían grandes expectativas con esta nueva tecnología. Sin embargo, las marcas han utilizado tanto este recurso sin agregarle alguna innovación, que los consumidores se han desencantado un poco de esta herramienta.
Las marcas han implementado los códigos QR tantas veces dentro de sus comunicaciones, que el consumidor ha ido perdiendo el interés por ellos, ya están acostumbrados a verlos y no les causa mayor impresión o curiosidad interactuar con ellos.
Debemos entender que siempre hay momentos y formas de emplear los recursos, los códigos QR también entran en esta característica. La vida actual es muy agetreada, por esto, si quieres que el consumidor se detenga y haga uso de este código, debes acompañarlo con un texto que lo atrape y le explique, brevemente, los beneficios que obtendrá luego de scanear el código.
Otro factor que ha colaborado con el desencantamiento de los usuarios ante los códigos QR es la mala experiencia, basta con una para que no quieras volver a intentarlo. Los errores más comunes, y que desencantan al consumidor, son: una vez scaneado, no reciben ninguna información adicional a la que ya leyeron en el volante, algunas marcas incluyen los códigos en piezas publicitarias imposibles de alcanzar, por ejemplo, en una valla en medio de una autopista o simplemente, códigos que no están bien creados y, cuando el consumidor los scanea, no funcionan.
Después de haber tenido estas malas experiencias, parece que las marcas han aprendido la forma correcta de implementar este tipo de códigos dentro de sus comunicaciones. Por ejemplo, un buen sitio para incluirlos, es en los comercios, los consumidores los usan buscando ofertas o alguna información adicional de los productos que ofrecen.
Otro buen ejemplo del uso adecuado del código, es la inclusión que hizo el servicio postal australiano dentro de los sellos postales. A través de esto, el remitente puede grabar un video de 15 segundos que el destinatario, o cualquier persona que encuentre el sobre, puede ver luego de scanear el código. Es una buena alternativa para refrescar el mercado del correo tradicional, ya que la tecnología lo ha dejado un poco atrás.
No todo está perdido para los códigos QR, si se empiezan a usar de manera adecuada en la comunicación. La realidad es que, un poco menos de la mitad de los consumidores, han hecho su decisión de compra gracias a tener la información detallada del producto que quieren comprar, en su teléfono móvil y esto fácilmente puede incluirse dentro de un código de este tipo.
(Ifnormación extraída de: http://www.puromarketing.com/21/18563/como-marcas-desencantado-fans-codigos.html#)