Con el emprendimiento vienen novedosas ideas. Pueden parecernos inusuales, pero muestran una gran eficiencia en los resultados. Una de ellas es el elevator pitch o elevator speech.
Este nuevo método de presentación de negocios surge por la necesidad de anunciar un proyecto o una idea, en un pequeño período de tiempo.
Por esta misma razón, este procedimiento consiste en presentar una síntesis de tu perfil profesional y del negocio que estás emprendiendo, en menos de un minuto. Su nombre se debe al tiempo que posees durante el trayecto en un ascensor.
La técnica te da la oportunidad de reconsiderar si estás utilizando las palabras correctas para llamar la atención de tu cliente, además de ahorrarte cierta cantidad de tiempo que se puede aprovechar para otras cosas.
La idea del elevator pitch es que el usuario se muestre interesado en tu idea o proyecto, y que te contacte más adelante para obtener el resto de la información.
A continuación, te ofrecemos varios consejos que puedes tener en cuenta a la hora de realizar tu presentación de negocios:
Conoce bien tu empresa y tu producto. Lo esencial de tu pitch es responder a las preguntas más frecuentes antes de que te las realicen. Por ejemplo: ¿Quién eres?, ¿A qué te dedicas?, ¿Cuál es tu empresa y qué ofrece?, ¿Qué te hace distinto a los demás?,¿Por qué deberían apostar por ti?
Sorprende a los inversores. No es la primera vez que les presentan un proyecto. Llama su atención de una manera positiva, preferiblemente durante la introducción de la idea.
Expone el problema existente. Tus ideas tienen como finalidad resolver un problema que posee el mercado. Resalta lo importante de este inconveniente y cómo tu negocio es la única solución que ofrece innovación y efectividad.
Inicia y finaliza la presentación de una forma memorable. Puedes terminar la idea con una frase ingeniosa para que el inversor te recuerde. ¡No olvides ofrecer tus datos para contactarlo nuevamente!
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