El crowdfunding ha demostrado ser una de las vías de obtener fondos más populares desde que fue creada, por lo cual ya es común ver todo tipo de proyectos ser financiados; desde libros y comics hasta el desarrollo de videojuegos independientes y la construcción de nuevas plataforma y productos innovadores.
Y ahora que todo emprendedor y empresario se está adaptando al crowdfunding, no es raro notar que la ciencia también está uniéndose a la fiebre del crowdfunding. Con los recientes problemas económicos a nivel mundial, una gran cantidad de científicos e investigadores han empezado a recurrir al crowdfunding para recaudar fondos para sus proyectos e investigaciones.
Marisa Alonso, una antigua investigadora postdoctoral en el Instituto Patterson de investigación del cáncer en Manchester, Reino Unido, fue una de las pioneras en convertir a la ciencia y las investigaciones en algo fácilmente accesible al gran público a cambio de su colaboración económica. Su primer crowdfunding fue “SciFund Challenge”, en el cual recaudó $2.800 dólares y por ende pudo continuar con su investigación para tratar el cáncer utilizando levaduras.
A pesar de que hoy en día se han logrado financiar varios proyectos e investigaciones científicas, y además han nacido plataformas de crowdfunding dedicadas únicamente a este tipo de proyectos (Taracea, Lánzanos, Verkami, Goteo, etc.) el crowdfunding no puede ser la única fuente de financiamiento que exista para el campo científico.
Para el campo científico, el crowdfunding es más que nada una “llamada de auxilio” para poder seguir funcionando. Como mucho, las recompensas por apoyar monetariamente los proyectos pueden ser libros y documentos de la investigación, lo cual no suele incentivar mucho al público, a diferencia de cuando financian productos y animaciones.
Adicionalmente, un crowdfunding normal sólo necesita el dinero para impulsarse, mientras que el campo científico necesita un ingreso constante, el cual usualmente es una sólida financiación pública y no de las plataformas de crowdfunding.
Es muy probable que las investigaciones científicas logren mantenerse en funcionamiento una o dos décadas más, pero si no se les ayuda lo más pronto posible para enfrentarse a la ruda situación económica, es posible que las investigaciones lleguen a un paro. Si estás interesado en apoyar a las investigaciones científicas, ¡ingresa a cualquiera de estas plataformas de crowdfunding y pon tu granito de arena para salvar a la ciencia! Puedes escoger entre Lánzanos, Verkami, Goteo y Vórticex.
(Información extraída de: http://noticias.lainformacion.com/ciencia-y-tecnologia/investigacion/crowdfunding-cientifico-una-llamada-de-socorro-de-la-ciencia_z7xs5bzzkYeCi6BKP1QPB2/)