Hoy en día, los mejores líderes deben aprender de sus clientes y consumidores de manera efectiva y eficiente. La excelencia en hacer las preguntas correctas se está convirtiendo rápidamente en una habilidad emergente y necesaria para los mejores líderes. Según Tina Seeling, profesora de la Universidad de Stanford, Estados Unidos, y autora del libro inGenius: A Crash Course on Creativity, perfeccionar esta habilidad puede ayudar a las empresas a aumentar la creatividad y la innovación de su impacto.
¿Pero cómo pueden los lideres recibir buenas respuestas haciendo las preguntas indicadas? ¿Cómo puedes fiarte del conocimiento del público por respuestas que construyen insights y conocimiento para generar buenos resultados?¿Cómo puede un líder ser menos “el oráculo” y más el minero de oro que reside intacto al otro lado de la organización?
Para los líderes de negocios, liberar el control es algo beneficioso cuando se trata de buscar insights y respuestas de la organización. Muchas compañías están dejando a especialistas en encuetas determinar las mejores preguntas, cómo estructurar las encuestas y qué quitar de los resultados. Los líderes deben considerar abrir un poco el proceso. Su gente puede darle grandes ideas y respuestas si interactuan con ellos en un ejercicio de crowdsourcing con las preguntas indicadas. Después de un tiempo, los líderes aprenden a confiar en el público cuando ven como aprecian las buenas preguntas y cómo los insights de crowdsourcing construyen el uno al otro.
Para que puedas llevar a cabo esta estrategia con éxito, compartimos contigo estos consejos:
1. Muévete rápido y ligero: nada en los negocios está desacelerando. De hecho, la competencia de ventajas hoy en día involucra velocidad para insights accionables. ¿Por qué debería tomar meses para que te acostumbre al feedback acerca de nuevos cambios de iniciativas, programas de aprendizaje y hasta nuevos productos y servicios? Quizá sea tiempo de reconsiderar la dependencia del tiempo de tu organización en encuestas que consumen mucho tiempo y que traen insights con fechas desactualizadas y por ende no tan útiles.
Es crítico el comprimir el tiempo de preguntas para tener grandes respuestas. Con herramientas de rápido cambio, hoy en día es posible realizarles preguntas a los empleados, clientes, managers, vendedores, etc., y recibir respuestas en días en vez de recibirlas en varios meses. Imagina lo valioso que sería que pudieras hacer una pregunta y empezar a recibir un set de insights valiosos en una semana, un día o hasta en una hora.
2. Hacer que menos sea realmente más: las compañías suelen encuestar gente en exceso, solo para enfrentar una sobrecarga de datos cuando se trata de procesar lo que reciben en respuesta. ¿Cuándo fue la última vez que hiciste una encuesta de 60 preguntas y de hecho la disfrutaste? Además, si le haces tantas preguntas a miles de personas, ¿Cómo vas a recibir las respuestas indicadas?, ¿O es posible que termines con un equipo de RRHH atascado por semanas analizando resultados de una encuesta y tratando de buscarle sentido a las respuestas?
La pregunta “correcta” debe estar enfocada en un sólo problema o área, el que sea más importante ahora. Y no importante sólo para ti, si no para la gente a la que le estás haciendo las preguntas a lo largo de la organización. De hecho, una pregunta bien pensada puede traer más insight que docenas de preguntas combinadas. Las encuestas, por ejemplo, son muy enfocadas en lo que necesitan los de RRHH. ¿Pero qué pasaría si balancean tus necesidades con las de la organización?
3. Crea una gran experiencia: la manera más rápida de recibir respuestas rápidas es haciendo que la experiencia sea agradable, quizá hasta fantástica. El problema es que la mayoría de los métodos de encuestas son temidos y tediosos porque la experiencia es seca y usualmente desagradable. ¿Qué tal si al hacer las preguntas la gente disfrutara el proceso? Esto se trata menos de hacer que la gente tome una encuesta y más acerca de la experiencia de persuadirlos a un proceso donde ven dónde están los demás, cómo contribuyen y le dan forma y dirección.
Facebook y otros medios sociales tomaron las riendas cuando la experiencia era simple y la gente sabía que aprenderían algo al finalizar. Su método más fiable era hacer publicaciones y tuits con preguntas simples como “¿Que sucede y que estás haciendo?”. Algo que es una experiencia agradable para los usuarios, una herramienta de corwdsourcing que interactua con el público y la gente puede ver cómo pueden cambiar la opinión de una compañía, hará que recibas más compromiso y comprimas el tiempo.
4. Permite a la data guiar el diálogo: ¿qué tal si tu colección de data ayudara a la evolución del mismo?, ¿Puede una pregunta crear respuestas que influyan una a la otra para generar una experiencia iterativa?, ¿Estás buscando data concreta o estás buscando insights del público que ayude a ratificar o retar tus agallas?
Crowdsourcing mina insights que le dan forma el uno al otro. El público puede generar un trend que lo ayude a explorar y evolucionar mientras el líder acumula tremendos insights e ideas. Ya hay un lugar para la recolección de datos, pero también está la necesidad de un proceso que sea más rápido, ágil y te ofrezca más insights para decisiones. De hecho, con crowdsourcing, una gran pregunta te llevara a idear cuál será la próxima pregunta ideal.
(Información extraida de: http://www.fastcompany.com/3005979/crowdsourcing-your-way-more-effective-leadership)