Vivimos en un mundo donde la reina es la tecnología. Y no podemos negar que ésta nos ha traído increíbles beneficios; pero siempre hay otro lado de la moneda. A medida que nos sumergimos más en este entorno, nos volvemos adictos. Así vamos creando un problema del cual, quizás no nos damos cuenta. Black Mirror, la serie británica de Netflix, ilustra la oscura realidad de la relación del hombre con la tecnología.
El elemento central de Black Mirror
Esta serie de ciencia ficción fue creada por Charlie Brooker y se estrenó en diciembre de 2011. La segunda temporada tiene 3 episodios, al igual que la primera, más un especial navideño; mientras que la tercera tiene 6 episodios.
Algo que la caracteriza es el hecho de que cada capítulo es una historia diferente; pero todos se centran en un elemento: las pantallas.
En Black Mirror las pantallas no se encuentran nada más en los dispositivos electrónicos, sino también en sus cuerpos. Estos tienen aparatos implantados que conviven con la anatomía humana. Es así como la serie nos muestra cómo la vinculación extrema con la tecnología puede llevarnos a la locura o la miseria.
Ficción hecha realidad
A pesar de que Black Mirror es una serie ficticia, todo lo que pasa puede ser un reflejo de nuestras interacciones a través de la tecnología. Los personajes poseen la tecnología más avanzada pero con problemas tradicionales como los de hoy en día. Aquí se ve cómo los protagonistas buscan en la tecnología las respuestas a sus problemas, sin darse cuenta que terminan buscando la solución en la causa del mismo.
Desde temáticas sobre realidad virtual, política y redes sociales, Black Mirror muestra cómo parece ser que mientras más conectados estamos, más desconectadas son nuestras vidas. Sus personajes son prisioneros de una realidad virtual implantada por ellos mismos.
Al verla es imposible no relacionarla con uno mismo. Realmente te pone a pensar en los efectos negativos que la tecnología puede tener sobre nosotros.
Un elenco que da la talla
De la misma forma, el casting de Black Mirror no decepciona. Varios episodios cuentan con actuaciones de destacadas figuras como Bryce Dallas Howard, Onna Chaplin, Michael Kelly, Jon Hamm, Jerome Flynn, entre otros.
Sin duda alguna es una serie que vale la pena ver. No sólo es una excelente forma de entretenimiento, sino que deja un mensaje sobre el cual todos podemos reflexionar.
