Hay muchos empleados, que ignoran las maneras apropiadas de dirigirse a sus jefes. Y ante este desconocimiento, se presentan dos escenarios: el primero, es el del empleado que teme opinar, así que prefiere quedarse callado; y el segundo, es el del empleado que no piensa antes de hablar, por lo que dice cualquier disparate y tiende a ser muy desafiante. Evita que esto suceda, y encuentra el balance ideal.
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Evita decirle esto a tu jefe:
No sé cómo hacerlo
Si tu jefe te pidió que hicieras alguna tarea, dale a entender que puede contar contigo. Si tienes dudas, intenta aclararlas con él una vez que ya hayas investigado cómo hacer el mandado. Acepta tu responsabilidad, antes de recurrir a pedirle ayuda; tu nivel de competencia se verá beneficiado.
No tengo tiempo para eso
Organízate, prioriza tu trabajo. Tu jefe no es el responsable de todo lo que te pueda atarear; necesitas darles mayor importancia a ciertas cosas, y con una buena organización, podrás cumplir con todo lo que tienes que hacer.
Métete tu trabajo por ...
No queremos terminar esta frase; todos sabemos cómo termina. Y también sabemos las consecuencias de ello. Si deseas renunciar, porque tu jefe tiende a ser abusivo, hazlo siempre de manera respetuosa. No importa si piensas que tu jefe es Lucifer en persona, mantén una postura respetuosa.
Hablaré con tu jefe
Hablar con el jefe de tu jefe (en recursos humanos) sobre una situación que te perturbe, puede o no resultar bien. Y las probabilidades apuntan más a que no tendrá los mejores resultados. Tienes que buscar una razón que sea ya culminante, para recurrir a esto. Pero recuerda que, si solucionaste con recursos humanos, puede que ahora tu jefe te guarde rencor. Es mejor que, si ya no puedes más, renuncies; y si no quieres renunciar, intenta sobrellevar la situación: mente positiva.
Yo no fui, ¡Fue teté!
Si fallaste en algo, toma la responsabilidad. Evita inculpar a otro; y si el error no fue tuyo, tampoco atribuyas la culpa. Explica lo que sucedió sin apuntar a tus compañeros. Esto te hará lucir muy poco profesional.
Si eres responsable, acéptalo. Si no es tu responsabilidad o culpa, explícalo. Pero no apuntes el dedo a nadie más. Nunca. Hacerlo te hará lucir poco profesional.
Me cae mal fulano
Evita hablar mal de tus colegas, o de cualquier persona con tu jefe. No intentes confabular con él como si se tratara de un amigo; criticar a otro te hará parecer irrespetuoso y crítico. Y alejar una actitud como esta, es importante para la compañía; además, podrías perder la confianza de tu jefe. Evita esto a como dé lugar.