¿Qué es el Marketing emocional?

El arte de vender productos ha evolucionado a lo largo de los años. Comenzando por la venta por inercia en los años siguientes a la segunda guerra mundial. Siguiendo por la creación de departamentos de ventas o comerciales. Y finalmente, llegando a las estrategias de marketing, donde se buscaban las necesidades del consumidor para satisfacerlas. Desde hace algunos años se observó un cambio sustancial, gracias al acceso total a la información que tiene todas las personas. Ya no se venden o compran productos, sino sensaciones. Compramos emociones.

¿Qué es el Marketing Emocional?

Este concepto ha surgido recientemente como ese campo de conocimiento orientado a movilizar en las personas sus sentimientos, valores y emociones. Teniendo como objetivo crear actitudes y acciones favorables hacia un determinado producto o marca.

El Marketing Emocional examina cuáles emociones satisfacen para luego ofrecer y venderlas. Por lo tanto, busca el posicionamiento estratégico en la mente del consumidor. Intentando conquistar sus emociones.

Estudios han indicado que casi el 99% de las ocasiones, compramos productos gracias a un impulso, sentimiento o emoción que casi no se ha razonado.

Es por eso que existe la publicidad emocional, la cual juega con la creación en el consumidor de una motivación emocional. Esto se hace siguiendo los deseos y/o las necesidades del consumidor, con el objetivo de crear una relación entre sus intereses y el producto en tangible.

Con la llegada del Marketing Emocional dejamos atrás la publicidad que se basaba únicamente en resaltar los beneficios de los productos. Ahora se destacan valores, sentimientos que se asocian a los anhelos y aspiraciones internas de los consumidores. El secreto está en generar relaciones afectivas.

Consumidores y emociones

Científicos estudiaron el comportamiento del individuo (afirmando que el ser humano es emocional), trasladándolo a las empresas a la hora de toma de decisiones en las compras. Aquí es donde surge el concepto de Neuromarketing. Este se basa en el estudio del cerebro sobre la comprensión del patrón inocente en el proceso de compra. Donde, según expertos, la atención de los consumidores es captada mediante la creación de imágenes que transmitan emociones y no a través de argumentos racionales.

Las estrategias de Marketing Emocional proponen que para dejar una huella en el consumidor se deben proporcionar redes estimulantes. Estas deben basarse en el placer y bienestar. La marca y/o producto debe acompañar al consumidor en momentos y situaciones especiales.