Los viajes al espacio exterior siempre se han visto limitados por la cantidad de recursos que los astronautas pueden llevar consigo. El oxígeno, la comida, el agua, son recursos vitales que todavía no se les ha desarrollado un medio para crearlos de manera fácil, rápida y económica, pero ¿y si en un futuro se pudieran producir todos estos recursos en una nave espacial o en un planeta a punto de ser colonizado?
El estudiante de postgrado del Colegio Real del Arte Julian Mechiorri, logró desarrollar la primera hoja bioartificial capaz de realizar la fotosíntesis como las plantas lo hacen de manera natural.
Esto fue posible a partir del uso de proteína de seda a la cual se le colocan dentro de la misma una serie de cloroplastos extraídos de células vegetales, gracias a la gran capacidad de la proteína para la estabilización de moléculas, la hoja bioartificial logran actuar como una hoja completamente natural.
Gracias a este increíble avance tecnológico la NASA podría verse interesada profundizar la invención para así especializarla para que sea usada en viajes espaciales de larga distancia, aumentando así el límite de los seres humanos para explorar el universo.
Las hojas bioartificiales desarrolladas por Melchiorri utilizan una cantidad diminuta de agua y luz para realizar la fotosíntesis, lo cual le dio la libertad de diseñar lámparas para interiores usando estas mismas hojas. De hecho, tiene como objetivo utilizar su invención para crear un filtro en los sistemas de ventilación de grandes edificios para ofrecer una mejor calidad de oxígeno.
A pesar de que el viaje interestelar todavía se encuentra en un futuro muy lejano, es seguro afirmar que cada día estamos un paso más cerca de que un ser humano ponga pie en planetas cada vez más lejanos.
(Información extraída de: http://gizmodo.com/the-first-man-made-biological-leaf-turns-light-and-wate-1612646588)