Varios ejemplares del robot Keeko, mejor conocido como asistente de enseñanza autónomo, está siendo empleado en 600 escuelas infantiles de China. Esto, con la finalidad de aprovecharlos como robots profesores.
¿Robots profesores?
Keeko, es un pequeño robot de cabeza redonda y con cara en forma de pantalla táctil. Estos robots profesores se desplazan rodando, orientados por las cámaras que poseen; las que a su vez pueden ser empleadas por los niños para grabar videos. Ya se encuentran en una de las mayores guarderías del país; ubicada entre Pekín y Tianjin. Allí, escucha las historias que los alumnos le cuentan y, posteriormente, las ordena y construye con ellas, interesantes cuentos a los que ameniza con música.
La apariencia Keeko, se inspiró en el protagonista de la hermosa película de Pixar, que lleva su nombre, Wall-E.
¿Cómo participan estos robots en la educación?
Lejos de reemplazar la enseñanza tradicional; las escuelas combinan técnicas modernas y actividades tradicionales. Por ello, los niños continúan aprendiendo caligrafía y kung-fu; mientras también cuentan con Keeko, quien apoya la enseñanza contribuyendo a mejorar la expresión oral, la capacidad espacial y la lógica de los niños.
Por si fuera poco, el robot baila con los niños, hace cálculos y operaciones matemáticas. Además, gracias a que cuenta con Inteligencia Artificial, es capaz de ir aprendiendo con el tiempo.
Aunque la introducción de estos robots profesores ha generado cierto temor acerca de si algún día reemplazarán en su totalidad a los profesores humanos; Shen Jianchun, el creador de este modelo de robot afirma que, aunque el robot cuenta con más recursos para ilustrar y explicar un contenido, carece de lo más importante, emociones. Las cuales son indispensables en la interacción entre personas y, sobre todo, en la educación de los niños.
Otros usos que se les está dando a los robots en China, es incorporarlos en las fábricas; colocarlos en las calles para dirigir el tráfico e incluso, otros robots están siendo empleados en los asilos de ancianos para ayudar a los cuidadores y entretener a los más de 1.300 ancianos que viven allí.