El presupuesto familiar permite la reducción de los gastos y la designación de más recursos para el ahorro familiar. Su planificación requiere de tiempo y conocimientos previos, pero es fácil elaborarlo. Además, sus beneficios se pueden extender a mediano o largo plazo.
El presupuesto es un documento en el que se plantea los ingresos próximos de la familia y, también, los futuros gastos.
La meta con él, es llevar el control de los gastos intentando que la diferencia entre ingresos y gastos sea a favor de los primeros.
Según expertos, es fundamental incluir a todos los miembros de la familia. Hay que ser sinceros con los gastos y realizar una lista donde se detalle los ingresos y egresos mensuales.
Hay que considerar actualizar el presupuesto familiar todos los meses por si existe alguna variación en lo planificado; uno de los puntos claves es “ahorrar”.
Lo más importante:
En la lista mencionada anteriormente se debe especificar el monto de los sueldos de todos los que aportan a la vivienda. Otros puntos claves que deben ser agregados, como: gastos de mercado, servicios básicos, gasolina, transporte, vestimenta, incluso hasta recreación.
Al realizar los cálculos del presupuesto familiar los ingresos deben ser mayores que los gastos, si no es así deberás reducir egresos. Es importante informarle al núcleo familiar sobre las decisiones tomadas en el presupuesto.
Planificar adecuadamente el presupuesto familiar es el primer paso para tomar el volante de tus finanzas.
