China se convertirá en el segundo país más lujoso del mundo

Según un estudio de mercado que realizó Euromonitor, y publicado por www.monkeyzen.com, China podría convertirse en el segundo mercado de lujos más grande del mundo, superado únicamente por los Estado Unidos.

Debido a la etapa fría que atraviesa la economía europea, el rápido crecimiento de la clase media y el desarrollo exponencial del mercado lujos, dado que ahora este apunta hacia un estrato socioeconómicos más amplio, diversos son los factores que encaminan a China hacia este peculiar puesto.

El mapa del mercado de lujos se está modificando, ya no es necesario ganar carretadas de billetes para poder comprarte algo de marca, y se estima que para este año el sector debería alcanzar algo así como los 302 billones de dólares en ingresos, creciendo un 4% más que en 2011.

China se ha convertido en un país de marcados y terribles contrastes. Calles plagadas de excesos, marcas costosas y mujeres asiáticas caminando por las calles con vestidos de diseñador carísimos, pequeños quioscos a mitad de la acera donde te venden los últimos modelos de Rolex. Calles con sólo BMW, Mercedes Benz y Ferraris estacionados. Todo alrededor con un precio estratosféricamente caro, pero si se atraviesa la última calle de estas zonas e inmediatamente pueden observarse barrios de pobreza absoluta y marginación extrema.

Las reacciones no se han hecho esperar, la firma de estudios de mercado Bain & company ha revelado sus estimaciones, decretando que al contrario de lo supuesto por Euromonitor, durante este 2012 el mercado de lujos en China tendrá un decremento muy serio, perdiendo cerca del 20% de su espectro de mercado, eso sumado al 10% que cayó en 2011. Por lo cual es casi imposible que logre ocupar el segundo lugar mundial. La inflación, el mercado de valores errático y la burbuja de la industria inmobiliaria, que afecta a la clase media de este país, son atribuidas como las principales causas de este pobre desempeño.

Aun así, marcas como Gucci y Burberry tienen planeado invertir más en este mercado y expandirse al interior, mientras que otros como Louis Vuitton y Chanel han decidido disminuir su impulso en China.