¿Eres de esas personas que no pueden dormir, aun cuando están cansadas?
Muchas veces nos pasa que tuvimos un día bastante ocupado o que tenemos muchas cosas rondando en la cabeza, y caemos en el insomnio.
Esto afecta aproximadamente al 30% de la población. Según la Fundación Nacional del Sueño, el 54% de los hombres y, el 63% de las mujeres han experimentado uno o más síntomas del insomnio, por lo menos una noche a la semana.
Se conocen muchas maneras y técnicas para poder evitar esas interminables horas de insomnio, mientras damos vueltas en la cama. Aquí te presentamos varias soluciones naturales que te pueden ayudar a resolver este problema.
Date un baño caliente. Además de que el agua caliente nos relaja, al salir de la ducha experimentamos una ligera disminución de nuestra temperatura corporal. De esta manera se adormece el cerebro y logramos conciliar el sueño con facilidad.
Ponte algo cómodo. Mientras más cómodo te sientas, más rápido podrás quedarte dormido. Utiliza telas de algodón, ya que no maltratan tu cuerpo y son frescas para cualquier tipo de ambiente. Sin embargo, dormir desnudo también trae muchos beneficios, si es de tu agrado, ¡inténtalo!
Evita cualquier ruido y aparatos electrónicos: Concéntrate en tu respiración, aísla cualquier sonido que pueda molestarte, y ni hablar del televisor o el teléfono celular (se ha demostrado que el brillo de las pantallas causa desvelos).
Regula tu ciclo de sueño. Intenta ir a la cama y despertarte al mismo tiempo, al igual que evitar las siestas en las tardes. Por muy difícil que sea, esto ayudará a tu cuerpo a que sepa cuándo debe dormir.
La administración de medicamentos para inducir el sueño hace que la enfermedad empeore
Si cumples con las horas de sueño que necesitas, notarás cómo tu salud mejorará, ¡sin contar la sensación de descanso y buen humor que tendrás!