El slogan juega un papel fundamental dentro del posicionamiento de tu empresa a nivel de competencia. Es un elemento diferenciador; ya que transmite, en una frase, las principales características y la idea principal de la compañía.
Es mucha información por transmitir en una corta frase, ¿cierto? Por ello, son muchos puntos y factores los que se deben considerar a la hora de construir un slogan.
Recuerda que tu slogan reflejará la personalidad de tu empresa
Para ayudarte a construir la frase perfecta para tu marca, tenemos varias premisas generales que puedes tomar en cuenta.
Piensa en un elemento único. Cuando creas la expresión que va a representar a la marca, debes asegurarte de que haga única a tu empresa en el mercado.
Algo que te puede ayudar en este paso es identificar aquello que te diferencia de la competencia.
También intenta que sea atemporal. Un slogan ideal debe tener la capacidad de sobrevivir en el tiempo.
Esto quiere decir que, aunque transcurran los años o las ofertas varíen, seguirá atrayendo a los clientes.
Un slogan atemporal expresa la estabilidad de la marca
Debe ser corto y comprensible. Con el pasar del tiempo, los segundos que tienen las marcas para dar a conocer su mensaje hacia los consumidores se reduce.
Es vital pensar en un slogan que emplee pocas palabras y que sea fácil de comprender. De esta forma será recordado. ¡Inspírate en la frase “decir mucho con poco”!
Balanceado. Un slogan es una parte importante de una estrategia de branding.
Se debe pensar en este elemento como un complemento y apoyo para el resto de los componentes que forman la imagen de la empresa.
Asimismo, debes involucrar al consumidor. Lograr empatía con tus clientes es crucial a la hora de construir el slogan. Si lo consigues en una sola frase, ¡lo lograste!
Recuerda que tu slogan será la tarjeta de presentación de tu empresa para el mercado. ¡Da lo mejor de ti y lúcete!