¿Y tú qué quieres cambiar?, esta es la pregunta que la plataforma Change.org hace a todo aquel que ingresa a su portal o se topa con los testimonios de miles de involucrados. Es una pregunta amplia, y es probable que hay mucho que cambiar solo que no todos se sienten capaces de lograrlo. La buena noticia es que pueden, y que hay miles de personas dispuestas a ayudar a que ese cambio se haga realidad.
Dicen que las ideas no duran mucho, que hay que saber qué hacer con ellas, hace un año conocí las dificultades que atraviesan muchas familias en España para comprar libros de texto. Y tuve una idea. Esta es Elena Alfaro y hoy ha entregado en el Ministerio de Educación 270.000 firmas, que apoyan su campaña. Es una satisfacción presentar una proposición de ley que tiene su origen en una persona en concreto, Elena Alfaro. Y, ¿qué sucedió? Pues que mi propuesta está a punto de convertirse en ley.
Como Elena, miles de personas en el mundo han logrado a través de la plataforma Change.org conseguir apoyo a sus ideas. Como Juana Vacas que consiguió gracias a 170.000 firmas que el asesino y expareja de su hija no le quitara la casa que ella había dejado como herencia o Alejandro, quien soñaba con jugar con la federación Andaluza de baloncesto pero no lo dejaban por tener una discapacidad, y gracias a Change.org su historia fue conocida, el apoyo fue inmediato y hoy es parte de la liga Provincial.
Todo inicio en febrero de 2007, ¿los promotores de la iniciativa? Ben Rattray y Marcos Dimas. Todo inició, principalmente, por el ansia que tenían los emprendedores de empoderar a los ciudadanos para que sean testigos del impacto de sus ideas y causas y cómo se pueden hace realidad, con el apoyo de millones.
Change.org ha conseguido que muchas de sus peticiones se hayan logrado, y reciben un gran apoyo por parte de 1.000 organizaciones sin ánimo de lucro y organizaciones no gubernamentales del mundo, como Amnistía Internacional y Humane Society.
Todo aquel que desee iniciar una causa debe ingresar al portal, el usuario inicia sesión se debe registrar, ya sea con su correo electrónico o Facebook. Una vez registrado el usuario inicia una petición, especificando la causa, el país y los detalles necesarios. Luego puede difundirla por las redes sociales.
Luego, todo aquel que ingrese a la plataforma podrá apoyar con su firma a que esa petición se convierta en realidad, que sea como ellos llaman: una VICTORIA. Como en el caso de Gabriel, un joven con discapacidad visual que tras sacar un excelente promedio en sus estudios derecho aspiraba ser juez pero en España a diferencia de países como en Brasil o Reino Unido no era posible.
Para el momento se han logrado 13.131 victorias en aproximadamente en 196 países.
En nuestros tiempos, el hecho de contar de plataformas como Change.org y contar de igual forma con el apoyo de desconocidos a la hora de dar inicio a una causa, es maravilloso. Despierta la esperanza y la fe en la humanidad, garantizando que personas pueden ciertamente cambiar el mundo.
¿Emprendimientos como Change.org, basado en la recolección de firmas, podrá ser una nueva forma de lograr sacar proyectos y causas delante de forma exitosa?
Información clave de nuestra historia:
- La firma o rúbrica es una escritura gráfica o grafo manuscrito que representa el nombre y apellido, o título, que una persona escribe de su propia mano y tiene fines identificatorios, jurídicos, representativos y diplomáticos.
Para saber más acerca de Change.org, estar al tanto de todas sus novedades o ponerte en contacto con los emprendedores detrás de tan interesante historia, puedes hacerlo entrando a su página web: https://www.change.org/.
También puedes seguir Change.org través de Facebook y Twitter para recibir todas sus actualizaciones.
