Alejandro Vacelar, ingeniero en sistema de 41 años de edad, siempre se dedicó a utilizar sus conocimientos de programación en crear sistemas capaces de resolver problemas. Uno de estos problemas es la compensación de los cheques, un proceso que puede llegar a ser muy engorroso, por lo que Alejandro decidió facilitar este proceso poniendo a prueba sus habilidades de solución de problemas.
Este fue el título que Alejandro utilizó a la hora de ponerse en contacto con nosotros a través de nuestro módulo de Cazadores de historias de nuestro portal 0800flor.net para contarnos su proyecto y de cómo se encaminó en una vida de emprendimiento para revolucionar el mundo de la banca.
La historia de Alejandro empezó a sus 17 años, cuando daba sus primeros pasos en programación, siempre ansioso por crear soluciones a todo tipo de problemas. Esta misma emoción lo llevó a desenvolverse en el área de la Banca donde tuvo la oportunidad de trabajar con los sistemas de los bancos nacionales, fue allí donde Alejandro conoció lo complejo que es el proceso de la cámara de compensación de cheques.
Alejandro pensaba que debía haber una manera de facilitar este proceso. En una de sus vacaciones se dedicó a desarrollar una solución automatizada
Tras veinte días de arduo trabajo, Alejandro contaba con un prototipo de lo que en un futuro se convertiría en un increíble proyecto, ahora era cuestión de encontrar a alguien que creyera en su idea. Después de tocar muchas puertas un pequeño banco nacional decidió darle una oportunidad.
Una vez que el producto de Alejandro fue colocado, el banco empezó a exigir la demanda de un soporte a la institución constante, lo cual creó un nuevo problema ¿cómo haría Alejandro para fortalecer su producto?
Gracias a las coincidencias del destino, Alejandro llegó a conocer a Richard De Almeida, emprendedor de Micro Films Center, durante una de sus visitas de promoción a los bancos. En cuanto De Almeida vio cómo funcionaba el sistema, decidió darle todo su apoyo a Alejandro.
La solución que Alejandro creó en su hogar durante su tiempo libre y a la cual le depositó toda su confianza, está instalada en 15 bancos, grandes y pequeños, alrededor de todo el país y continua expandiéndose bajo el nombre de SYS-COMPENSACION, una suite de productos especializados en el manejo de actividades bancarias.
A pesar de que la tecnología automatizada es muy avanzada, el producto seguía necesitando de un operador para que este analice la similitud de las imágenes y realice un veredicto final.
Alejandro y su equipo decidieron que debían desarrollar una solución al problema que supone el error humano en las comparaciones de firmas manuscritas para que se hiciera de manera automática.
El año pasado, mientras la familia de Alejandro dormía pacíficamente, él no podía dejar de plantearse cómo solucionar el problema de las comparaciones de imágenes y firmas manuscritas. As que se levantó en la madrugada y empezó a investigar en Google quién se había planteado el mismo problema, para su suerte, un grupo de emprendedores españoles que tienen una empresa llamada www.esolva.com habían realizado una tesis de grado en este campo de investigación de comparación de imágenes. Sin pensarlo dos veces, Alejandro se puso en contacto con ellos y actualmente se encuentran desarrollando un caso de éxito en un banco de nuestro país.
Diez años más tarde, después de haber tomado la decisión de hacer realidad su sueño de emprendimiento, Alejandro se encuentra más feliz que nunca embarcado en una increíble aventura de emprendimiento que nunca tendrá un final, sino una constante evolución.
¿Es el emprendimiento tecnológico adaptable a cualquier aspecto laboral y cotidiano?
Información clave de nuestra historia:
- A principio de 1550, en la republica holandesa, las personas que buscaban proteger sus grandes sumas de dinero se las entregaban a unos “cajeros”, quienes almacenaban su dinero por una cuota y estos entregaban una nota con el monto depositado para luego ser cobrado por el dueño. Estas notas fueron los primeros cheques primitivos.
- La tecnología ha demostrado poder ser desarrollada de manera fácil, acelerada y con una capacidad increíble de optimizar muchos aspectos de la vida cotidiana; desde crear aplicaciones para dispositivos móviles capaces de organizar las tareas e incluso determinar el estado de salud del usuario hasta desarrollar nuevas maneras de solucionar un problema, indiferentemente de su gravedad. Lo único que se necesita para emprender tecnológicamente es creatividad, un problema a solucionar y obtener las herramientas necesarias para hacer realidad el emprendimiento.