Una vez que una persona le recomienda a otro un producto, se genera un "boca a boca" que permite que dicho producto se dé a conocer. A eso se le conoce como marketing del más tradicional. Dos emprendedores mexicanos tomaron esta premisa para sacar adelante un emprendimiento que usa la inteligencia artificial y los micro influencers. Lo llamaron Crowdsquad.
Entre cervezas y tacos
Todo inició en una tarde donde unos tacos y un par de cervezas fueron los protagonistas de una reunión entre recién conocidos. Allí, Gabriel Garavit y Germán Domínguez conversaron sobre sus ideas. Además, surge una amistad de inmediato y la inquietud de emprender juntos. Nunca imaginaron que revolucionarían la manera en la que se hace marketing digital.
Ambos trabajaban en IBM sin conocerse. Y eso que todo el mundo le hablaba al uno del otro porque ambos coincidían en ideas y proyectos.
Con la experiencia que tenía Germán en la parte de tecnología e inteligencia artificial; y con la habilidad de Gabriel en marketing, hicieron el match ideal para hacer un nuevo negocio.
Fundaron pronto Crowdsquad, la primera plataforma mexicana de marketing de micro-influenciadores que trabaja con la nube IBM Bluemix y es potenciada por la inteligencia artificial de Watson.
Los micro influencers
El tema de los influencers dio para muchas reuniones; y decidieron irse por una clase distinta a la que generalmente se conoce actualmente. Muchos influencers cuentan con millones de seguidores, pero no necesariamente esto quiere decir que impacten de verdad en quienes lo siguen. Por su parte, una persona que tenga más de 500 seguidores puede ser considerada un influencer.
Ellos son una buena referencia para su entorno, y para los amigos que escuchan las recomendaciones de otros amigos antes de comprar, también. Pero si un producto es publicitado por, digamos Kim Kardashian, muchos de inmediato concluirán que fue algo regalado o que a ella le pagan cierta cantidad de dinero por hacer tal recomendación. Por otro lado, si el anuncio o recomendación lo hace alguien más cercano, es más creíble. Resultará más fácil sentirse identificado.
Para Crowdsquad una persona puede tener 500 seguidores y ser alguien de autoridad porque quienes lo siguen forman parte de un círculo cercano que confía en él y en sus recomendaciones.
El éxito de Crowdsquad
Hoy Crowdsquad cuenta con más de tres mil micro influencers montados en la plataforma. Operan a nivel nacional y el número va en aumento; en promedio registran 60 personas diarias que quieren participar en alguna campaña.
Una de las restricciones es que las personas no tengan más de 20 mil seguidores. Sin embargo, cualquiera se puede inscribir y cuando exista una campaña que requiera de su perfil, se le notifica. Para seguridad de las marcas, los mensajes se suben en la plataforma, si son correctos se publican y la empresa para quien se esté trabajando es dueña de ese contenido.
Hoy estos emprendedores no sólo buscan revolucionar la manera de hacer marketing digital. Además, buscan pagarles a todos aquellos que sueñan con ser influencers y obtener ganancias por usar sus redes sociales.