Mientras cursaba sus estudios universitarios; la joven de 23 años de edad, Diana de Arias; sufrió un derrame cerebral que le dejó como consecuencia, daño cerebral adquirido. Tras lograr rehabilitarse decidió volcar su experiencia en un juego de mesa terapéutico;de estimulación cognitiva, para ayudar a otras personas. Así nació, Decedario.
Decedario, el juego de mesa que rehabilita y mejora la calidad de vida
Como estudiante de Diseño Gráfico, Diana de Arias disfrutaba de una beca en Roma; desde donde había viajado en Navidad a pasar vacaciones con su familia. Una noche, sintió que la parte derecha de su cuerpo se había paralizado; tenía muchas dificultades para caminar y veía doble. De inmediato, sus padres la llevaron a un hospital donde le fue diagnosticado un derrame cerebral que le había dejado esas secuelas; y se le informó que la causa era una malformación congénita que requería una intervención quirúrgica.
Tras su intervención y luego de pasar seis meses sin poder caminar, escribir y comer por sí misma, Diana regresó a la universidad y; tras comprobar que no existía ninguna herramienta para paliar las secuelas en el habla de las personas afectadas por Daño Cerebral Adquirido, decidió como proyecto final de carrera, poner el diseño al servicio de las personas. Así, apoyada en su experiencia personal, en especialistas y en una profunda investigación, dio vida a Decedario, un juego de mesa con más de 40 actividades para ejercitar funciones cognitivas y que sirve como herramienta terapéutica para tratar patologías relacionadas con el lenguaje, la comunicación y la psicomotricidad.
Dando un paso a su proyecto de vida
[caption id="attachment_51190" align="alignright" width="300"] Cortesía Gráffica[/caption]
Una idea que se convirtió luego en su proyecto de vida; y que le ayudó a conocer todo lo que es capaz de aportar al mundo. Desde entonces, buscando siempre crear un impacto positivo en la vida de las personas, apoyada por un equipo de mujeres tan jóvenes como ella asiste a conferencias y visita hospitales y asociaciones con su juego, que se ha convertido en un material de estimulación cognitiva no solo para tratar las secuelas del Daño Cerebral Adquirido, sino también para patologías que derivan en problemas del aprendizaje, el lenguaje o la comunicación como el autismo, el alzhéimer, síndrome de Down, el párkinson o la dislexia.
¿Cómo puede desarrollarse en los emprendedores la capacidad de detectar en los problemas y obstáculos una oportunidad de innovar?
POR CIERTO
Dando un paso adelante, y en sintonía con un mundo cada vez más tecnológico, Diana se está preparando para lanzar este juego a manera de aplicación; y no descarta establecer una empresa dedicada al diseño y desarrollo de juegos terapéuticos.