Vivienne Harr, con tan sólo 8 años, utilizó todos los recursos que tenía a su alcance para cambiar una triste realidad de nuestro mundo, la esclavitud infantil. Sus padres fueron de viaje a Sonoma, California, y asistieron a la exposición de fotografías de la artista lisa Christine. Impactados por la realidad que reflejaban las imágenes, la preja mosró una de las fotografías a su hija. Al ver fotografías de los niños de su edad realizando trabajos forzosos, Vivienne decidió cambiar el mundo para ellos.
Vivienne estableció un puesto de limonada durante 365 días seguidos, no importaba si había lluvia o sol, para llamar la atención y contribuir a poner fin a la esclavitud infantil. Con un poco de agua filtrada, limones, néctar de agave azul y frambuesas orgánicas, Vivienne preparó su famosa limonada rosada.
El primer objetivo de Vivienne era recaudar más de 100.000 dólares para ayudar a liberar niños esclavos; no sólo alcanzó esta meta, la superó por mucho. Desde entonces, esta pequeña emprendedora social ha recaudado más de 800.000 dólares, iniciando su propia empresa embotelladora de "lemon-aid", limonada para ayudar, una botella a la vez.
Hasta junio de 2013, la pequeña Vivienne había colaborado con distintas organizaciones por donaciones de más de 105.000 dólares. Su meta como emprendedora social, es donar la mitad de todas las ganancias de cada compra a cinco fundaciones que luchan para erradicar la esclavitud infantil: Free the Slaves, Fundación Nepal Juventud, UNICEF, el programa GEMS y el Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil.
¿Es la edad un impedimento para hacerse un emprendedor social?
Conoce más sobre este proyecto en su página web http://www.makeastandlemonade.com, o sigue a la pequeña Vivienne en Twitter, @vivienneharr.
Información clave de nuestra historia:
- La Organización Internacional del Trabajo, OIT, es la agencia de las Naciones Unidas especializada en el mundo del trabajo. Fundada en 1919, trabaja por la justicia social para alcanzar la paz universal y duradera.
- Según la Organización Internacional del Trabajo, OIT, casi 21 millones de personas en el mundo son víctimas de la esclavitud o trabajo forzoso. Como trabajo forzoso se conoce a los empleos que no pueden abandonar y que les han sido impuestos por medio de coacción o engaño. Se estima que el 26% de estos esclavos son menores de 18 años.
- La OIT asegura que, de estos 21 millones de esclavos, 19 son explotadas por individuos o empesas privadas, y 2 millones por el Estado o grupos rebeldes. De aquellos que son explotados por individuos, 4,5 millones de ellos son víctimas de explotación sexual.