En el año 2013, Ron, esposo de la inglesa Kim Antonoiu, de 30 años; estuvo a punto de morir en un restaurante, luego de consumir un alimento entre cuyos ingredientes estaban las nueces; a las que Ron es alérgico. Lo grave del hecho es que, previamente, Ron había interrogado al personal de servicio del restaurant y éste le había brindado una información errónea. Impactada por la escena que presenció, en la que vio caer desmayado, casi sin vida, a su esposo; Kim se decidió a buscar una manera de prevenir estas riesgosas situaciones. De allí nació Kafoodle.
¿Cómo se desarrolló Kafoodle?
Kim, contaba con gran experiencia en el desarrollo de importantes soluciones de software en línea y móviles para la industria de la construcción; así que decidió aprovechar este conocimiento en marcar la diferencia en la seguridad alimentaria; permitiendo que las personas alérgicas puedan comer con confianza y seguridad, en cualquier restaurante.
Desde entonces, junto a su amiga Tarryn, experta hotelera; se ha dedicado al desarrollo del servicio de software Kafoodle, con la finalidad de hacer más transparente la información sobre los alérgenos tanto para las empresas como para los clientes.
Este servicio de software es muy fácil de usar. Las empresas de alimentos y bebidas cargan los menús en ella y, cuando el usuario hace clic en aquello a lo que es alérgico; la aplicación usa su ubicación para darte restaurantes cercanos que son seguros para que coma. Además, le proporciona la calificación de higiene de los alimentos del restaurante, así como una lista de platos sin alérgenos adecuados para su consumo.
Además de la rentabilidad de la app, por el alto número de restaurantes que la emplean en la Unión Europea, lo que más las hace sentir satisfacción a sus fundadoras es tener la certeza de que gracias a ellas, los consumidores podrán volver a tener experiencias culinarias placenteras sin poner en riesgo su salud.
REDES:
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https://www.instagram.com/kafoodle/
@Kafoodle