La ingeniera de diseño de producción, colombiana, ViViana Torres; quien por algún tiempo se desempeñó como docente de una universidad, decidió renunciar a su trabajo e iniciar su propio camino: La isla de los abrazadores. Hugger Island.
Muñecos que abrazan en una isla de abrazadores
Después de 12 años de trabajar en una universidad, como profesora de investigación; Viviana decidió renunciar e irse a Alemania con una beca de Emprendimiento Social. Con los 4 millones de pesos colombianos de su renuncia y con Hugger Island ya diseñado; comenzó a comprar algodón y telas y a producir los muñecos.
Los abrazadores son muñecos de trapo que, gracias a sus largos brazos, brindan una demostración de afecto para quienes reciben sus abrazos; la cual ayuda a aumentar el nivel de oxitocina en la sangre; creando una sensación de bienestar, que incluso ayuda a las personas a dormir mejor.
Un abrazador cuesta 40.000 o 60.000 pesos. Con el primer valor se ayuda a las mujeres cabeza de familia para que tengan un empleo, mientras que, con el segundo, se hace una donación para que otra persona pueda tener su propio abrazador.
https://www.youtube.com/watch?v=RhiyhXAUFxc
El muñeco abrazador, que se adapta al cuello de la persona, no tiene ojos ni boca ni nariz, pero sí corazón, y todo lo hace a partir de este. Cada uno, viene acompañado de un libro que recoge su historia.
Los cuatro muñecos abrazadores, que nacieron en una isla, tienen una historia diferente. Son fabricados con materiales amigables con el medio ambiente, por mujeres de las comunidades; que trabajan desde sus casas y logran mejorar su calidad de vida a partir de esta posibilidad.
Hoy ya más de 7.000 personas ya tienen un Abrazador, bien sea porque lo han comprado o porque lo han recibido en donación.
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