Tras ser detenido y deportado de Estados Unidos al intentar emigrar, el salvadoreño Carlos Castro decidió no rendirse. Así fue como más tarde logró ingresar con éxito y 5 años después obtener un estatus legal que le permitió emprender en un negocio; que hoy genera ingresos que superan los 30 millones de dólares. Así nació Todos Supermarket.
Todos Supermarket, el sueño hecho realidad de un inmigrante salvadoreño
Carlos trabaja desde los 12 años de edad; cuando después de cursar el sexto grado comenzó a estudiar de noche para poder trabajar de día en la construcción. Más tarde, estudió ingeniería industrial y se desempeñó como técnico en una empresa americana; donde presenció cómo las tendencias políticas penetraban los sindicatos y provocaban conflictos armados en las calles. Temeroso de lo que preveía sucedería en su país, se atrevió a emigrar por los caminos verdes, lo que lo llevó a ser detenido por la patrulla fronteriza, pasar 45 días preso en un centro de detención de El Paso, Texas y finalmente, ser deportado. Sin embargo, decidido a no rendirse, volvió a intentarlo; y esta vez sí consiguió llegar hasta Los Ángeles, desde donde partió a Washington D.C.
Sus primeros trabajos fueron como empleado de limpieza en diferentes empresas, una de las cuales se dedicaba a la construcción y donde, al descubrir que Carlos sabía leer planos le asignaron trabajos de demolición. Así, con su nuevo puesto y la llegada de su esposa, quien empezó a trabajar como niñera, lograron incrementar sus ingresos y hasta conseguir la posibilidad de ahorrar.
¿Cómo nació la idea?
Un día, visitando a unos amigos, se enteró de que en la zona no había tiendas de comida latina; y aunque no sabía cómo montar un supermercado se decidió a hacerlo. Para empezar, invirtió sus ahorros, hipotecó dos veces su casa y vendió su automóvil. Comenzó entonces, en un pequeño local con tan sólo 3 empleados. Ahora, después de 27 años, su nómina ha crecido hasta 200 empleados y ya cuenta con dos sucursales. A las que sus clientes ven como un lugar de reencuentro entre inmigrantes y con sus propias raíces y donde, además, pueden recibir ayuda a través de programas como Idioma, Asesoría Legal, Asesoría Tributaria, seminarios. etc.
¿Cómo replicar esta iniciativa que, además de ser un exitoso emprendimiento brinda importantes beneficios a los latinos que emigran a Estados Unidos?