Con el objetivo de promover cada vez más, el uso de la bicicleta; desplazando con ello al automóvil, las autoridades locales en Suiza han emprendido diversas iniciativas. Entre éstas, en Zúrich, la ciudad más poblada del país; se creó Velokafi. Una cafetería que ofrece a los visitantes la oportunidad de tomarse un delicioso café, cómodamente sentados, además, en su propia bicicleta.
Velokafi, disfrutar del cine y un café, sin bajarse de la bicicleta
Con la meta clara de duplicar, de aquí a 2025, el número de bicicletas que ruedan por sus calles; Zúrich lanzó la campaña Estrategia Ciudad Tráfico 2025, con la que aspira satisfacer la creciente necesidad de movilidad. Así, está expandiendo el transporte público, diseñando de manera atractiva los espacios públicos; y mejorando el tráfico de peatones y ciclistas. En este último punto, hace alrededor de cinco años, se estableció Velokafi; un ‘drive-in’ para ciclistas, dotado de ”aparca bicis” muy especiales.
Lo interesante del lugar es que no se necesitan sillas. Allí, el ciclista no tiene que bajarse de su bicicleta para tomar el café. Los aparcamientos tienen una ranura donde introducir la rueda delantera, y encima del manillar se extiende una mesa de madera para apoyar la bebida y alimentos que allí se expenden.
Para terminar de convencer a los ciudadanos de que acudan al lugar, y que lo hagan sobre dos ruedas, todos los clientes ciclistas obtienen, a través de internet, un bono con el que tienen gratis su primer consumo.
El éxito de la idea ha llevado a enriquecerla aún más, convirtiendo el sitio también, en un autocine café para ciclistas. Donde cualquiera que se registre en el autocine en Foursquare o Facebook recibe una taza de café gratis del barista.
El concepto, ahorra al ciclista tiempo para buscar estacionamiento, encadenar la bicicleta y, sobre todo, la preocupación por si encontrará su bicicleta, luego de ver su película y disfrutar un café.
¿Cómo fomentar en nuestras ciudades el desarrollo de infraestructuras para ciclistas?
