Alrededor de 1.6 millones de personas no tienen electricidad en el mundo y muchos no estamos enterados de esto. Mientras que para nosotros es algo normal llegar a casa y encender las luces, ver tv, tener un calentador, para millones de personas esto no es una realidad. Muchos deben usar unos 5 litros de kerosene al mes, que además les sale caro, para poder disfrutar de la electricidad. Patrick Walsh sintió que era necesario cambiar esta realidad y puso manos a la obra…
La visión que tenía Patrick Waalsh sobre la vida cambió completamente cuando en 2005 se fue a trabajar con los “Ingenieros Sin Fronteras” en la India, este programa estaba vinculado con la Universidad de Illinois donde Patrick estudió. Patrick emprendió el viaje junto a un grupo, para trabajar en zonas muy rurales de la India.
Allí se dió cuenta que los residentes usaban lámparas con querosene para poder tener algo de luz y empezó a buscar la forma de llevar energía a la comunidad… pero, ¿y el resto de las villas? En India existen más de 2000 villas rurales que están privadas de este servicio ¿cómo hacer algo al respecto?
Patrick decidió cambiar la realidad de estos residentes para siempre, pronto armó su equipo de trabajo y se sentó a diseñar los primeros prototipos de linternas solares, tuvo como asesores a unos profesores de la Universidad de Illinois quienes les ayudaron a entender cómo empezar un negocio y cómo lograr que este pueda dar una solución a nivel global.
En 2007 Mayank Sekhsaria y Anish Thakkar se unieron a Patrick como co-fundadores para juntos lograr difundir el emprendimiento en India, Africa, China y así sucesivamente. La misión de Greenlight Planet es cambiar el mundo, es por esto que para el momento miles de Greenlighters de todo están trabajando duro para traer soluciones energéticas innovadoras a los más necesitados.
Patrick y su equipo crearon unas lámparas led que llevan por nombre Sun King, son duraderas, a prueba de agua y con una capacidad de iluminar mucho más que una lámpara de querosene, lo único que se necesita para poderlas usara es cargar con la luz del sol la lámpara durante el día y luego disfrutar de sus beneficios durante toda la noche. Sin contaminación ni posibles problemas a la salud, como a diferencia de las que usan querosene. Una vez que estas lámparas llegaron a los residentes los cambios fueron evidentes, Bakhrud govind comenta:
Aproximadamente, seis mil microemprendedores están dedicados a vender las lámparas Sun King. Las venden en sus propias comunidades y en otras aledañas, permitiendo aumentar la calidad de vida de sus familiares y vecinos.
El grupo asociado al negocio es bastante diverso: profesores de escuelas, cuidadores de las villas, madres amas de casa, estudiantes universitarios y muchos más, todos activos promoviendo la iniciativa que Patrick ideó para solucionar un problema real y global
Cualquiera puede comprar estas lámparas y comenzar a contribuir con tan sólo ingresar a la pagina web http://greenlightplanet.com.
Ideas como Greenlight Planet que van de la mano de la ayuda a social y el cuidado del medio ambiente ¿son la nueva forma de llevar a cabo emprendimientos sociales?
Información clave de nuestra historia:
- Una 2.5 millones de personas en India sufren quemaduras por el uso de lámparas de querosene.
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