En 1986 un grupo de cerca de treinta personas, preocupados por la situación de los indigentes en las calles, se decide a cambiar esa realidad y abren en 1987 un centro en el Raval de Barcelona, con una ducha con depósito y un pequeño closet.
De esa fecha hasta hoy han crecido en apoyo a personas sin hogar. Hoy ofrecen una aplicación que puede darles más oxígeno.
Se trata de la aplicación “Nobody sleeping on the Street”, que explica que en Barcelona 900 personas duermen en la calle todos los días da opción a colaborar económicamente como personas, empresas o grupos.
Lo interesante de la aplicación es que quien vaya a colaborar puede conocer en qué se invertirá su aporte. Por ejemplo, con 10 euros el equipo de calle de Arrels, que busca en la calle los indigentes, puede realizar tres visitas. Con 20 euros se paga una noche de pensión en cualquiera de los centros de atención.
Con 45 euros se le ofrece comida por una semana a una persona sin techo, y con 350 euros paga la renta de apartamento temporal para el uso de tres personas.
Cuando se investiga las causas por las que una persona acaba viviendo en la calle se consiguen una multiplicidad de factores, como el caso de German.
Desde 1987 la fundación Arrels ha acompañado a más de 8.000 personas sin hogar en su camino hacia la autonomía, ofreciéndoles alojamiento, alimentación y atención social y sanitaria. Hasta la fecha cuentan con casi 4.000 donantes pero la idea es hacer crecer esta base para lograr un mayor impacto a través de la aplicación Nobody sleeping on the Street que se ofrece para móviles con sistema Android.
“Que nadie duerma en la calle es su lema”, ¿será posible que al hacer más accesible a los donantes las causas a las cuales donar se potencie la colaboración social?
Información clave de nuestra historia:
- TECHO trabaja para superar la pobreza y exclusión, a través del trabajo de jóvenes voluntarios y familias de las comunidades más vulnerables, quienes en un trabajo conjunto, construyen viviendas transitorias.
- En la Unión Europea hay 30 millones de ciudadanos que no disponen de un alojamiento digno, de los cuales 410.000 no tienen hogar. En cuanto a España, por cada 100.000 habitantes hay, como mínimo, 71 personas sin hogar; y en el caso de Barcelona, hay cerca de 3.000 personas sin hogar y 900 de ellos duermen en las calles.
